Desalcoholización de vinos: oportunidades y limitaciones para las bodegas de San Juan
Hay un acuerdo generalizado en que es una alternativa para diversificar la matriz productiva y tener más opciones de comercialización. Pero también reconocen que para hacer este producto requieren de inversión, cosa que es difícil hacer, por lo menos en este momento.
Las tendencias de consumo indican que las personas se vuelcan a bebidas que tienen menor graduación alcohólica, por ende, los buenos resultados que tienen las cervezas en los consumidores. Entre los que toman al vino como una opción cada día los prefieren con menos graduación alcohólica, inclusive en los últimos tiempos hubo una tendencia que marcaría que las modas del consumo están yendo hacia los blancos, al contrario de lo que ocurría históricamente.
Atendiendo a este tipo de requisitoria de los consumidores es que una de las primeras resoluciones de la nueva gestión el Instituto Nacional de Vitivinicultura es que aprobó la resolución 5/2024 por la cual se incorporó la metodología de elaboración a la Ley General de Vinos 14.878; es decir los productos "Vino Parcialmente Desalcoholizado y Vino Desalcoholizado o Vino Sin Alcohol".
Lo cierto es que esto que parece nuevo, no lo es tanto, ya en el 2022 el INV aprobó una resolución por la cual se permitía la desalcoholización de vinos. En este momento solo podía bajarse un par de grados a los varietales con métodos que estaban aprobados por la Organización Internacional del Vino.
De hecho, había una resolución de 1992 del INV que indicaba que para el vino sea considerado como tal no podría tener menos de cinco grados. En San Juan, el antecedente de la elaboración de un vino desalcoholizado se encuentra en Fraccionadora San Juan quien en el 2021 elaboró un Malbec con solo 7 grados.
Por ese entonces, en San Juan se le trató de dar impulso a este tipo de elaboración de vinos e incluso el Ministerio de la Producción de ese momento apoyó con la compra de tres desalcoholizadores para tres bodegas. La única que lanzó un vino con estas características fue Fraccionadora San Juan. Seguir con esta tendencia en ese momento quedó en el cajón de los recuerdos y no tuvo éxito.
Hoy la resolución 5/2024 permite la elaboración de "Vino Parcialmente Desalcoholizado y Vino Desalcoholizado o Vino Sin Alcohol". De todos modos, no es una opción que la puedan tomar todos pues para sacarle el alcohol a un vino se tiene que comprar tecnología que es bastante cara. Cuando analiza esta realidad, el enólogo Marcelo Ureta, gerente del Centro y Colegio de Enologos manifiesta que "el tema está del vino sin alcohol está instalándose, pero todavía no hay nadie en la provincia".
Al profundizar afirmó que "seguro será algún grupo grande, por la sencilla razón que cualquier equipo para desalcoholizar es muy costoso. Además, que deberás tener una muy buena penetración de mercado para lograr imponerlo", detalló el profesional.
Por su parte, el presidente de la Cámara de Bodegueros, Mauricio Colomer sobre el tema manifestó que "si bien está la tecnología para elaborar este tipo de vinos, en la actualidad la demanda que tiene el mercado es ínfima". Por lo tanto, quien opte por esta alternativa "tendrá que hacer una campaña que haga foco en el consumo de vinos con menos alcohol".
En tanto que enólogo Juan Camuñas mira esta opción de vinos y manifiesta que "si el mercado lo pide seguramente San Juan lo hará, pero también depende del volumen por una cuestión de costos", en alusión a que este producto tiene un paso más que es la desalcoholización y para ello hay que adquirir tecnología.
Consultado Oscar Biondolillo de Casa Aguma afirmó que "habrá un muy buen mercado para los vinos sin alcohol, también ocurrirá lo mismo con los vinos de baja graduación de 4 o 5 grados". Además, agregó que "el vino sin alcohol no va a competir con el que si lo tiene. Cuando coma un asado no lo voy a reemplazar con el vino sin alcohol. Pero durante la semana, que no consumo vino, antes que tomar un agua saborizada prefiero tomar un vino sin alcohol y seguir trabajando".
Por su parte, Pedro Pellegrina, Presidente del Centro de Enólogos afirmó que los vinos desalcoholizados o sin alcohol "son una buena alternativa, para buscar otros clientes, para diversificar la matriz del vino". Sin embargo, marcó que como condicionante está el hecho de que invertir en la tecnología que requiere este tipo de productos es muy cara. "No todos pueden invertir en esos procesos, por lo menos por ahora", sentenció.
Varios de los consultados ven el costo de los desalcoholizadores como un limitante a la hora de hacer este producto. Los que tienen calidad son importados y ello requiere de una importante inversión. Explicaron que en su momento se hizo un prototipo de desalcoholizador en Mendoza, pero fracasó.
LIMITANTE
La mayoría ven con buenos ojos desollar vinos desalcoholizados o sin alcohol, sin embargo sostienen que se tiene que hacer una inversión, que es la compra del desalcoholizador, que tiene un costo importante, sobre todo para pequeños emprendimientos vitícolas que quieran incursionar en este producto.
