Alerta en la construcción sanjuanina: acumulan dos años de caída y advierten sobre costos "inviables"
Ramón Martínez, presidente de la Cámara Argentina de la Construcción en San Juan, advirtió que el sector atraviesa dos años de caída sostenida y alertó sobre el riesgo de no anticiparse a la llegada de la gran minería.

Mientras en San Juan comienzan a definirse nuevas licitaciones y se reactiva tímidamente la agenda de obras públicas, el presidente de la delegación local de la Cámara Argentina de la Construcción, Ramón Martínez, trazó un diagnóstico crudo sobre el presente del sector. "Hace dos años que venimos en caída. Las empresas se achicaron al máximo y muchas están buscando alternativas donde antes no las veían", sostuvo en diálogo con radio 1020.
Aunque destacó que los nuevos anuncios, como la licitación de obras en la terminal, representan un alivio, fue enfático al señalar que el parate se acentuó con el cambio de gobierno: "Desde que asumió el presidente Milei, la obra pública se frenó. Los fondos nacionales dejaron de llegar y solo ingresan coparticipación y recursos para vivienda. El gobierno provincial hace lo que puede con lo que tiene", explicó.
Martínez también se refirió a la expectativa que genera el desembarco de la gran minería, pero planteó un desafío urgente: "Estamos bastante quedados con eso. Si esperamos a que lleguen para empezar a trabajar, vamos a cometer el mismo error que se cometió en Vaca Muerta. Las obras tenemos que hacerlas antes".
El empresario remarcó que muchas firmas están enfocadas hoy en licitaciones menores, emprendimientos privados, oficinas y galpones, buscando "amoldarse a la situación" y evitar desarmar equipos de trabajo consolidados: "Desprenderse de una cuadrilla cuesta muchísimo. Armar un equipo lleva años y no queremos perder eso", explicó.
Respecto al escenario económico, Martínez fue tajante: "Hoy los costos están altísimos. Un inodoro cuesta más de 100 dólares. Así no se puede construir ni incentivar la inversión". Y agregó: "Estamos igual que Mendoza, con precios similares. En junio se registró un 24% más que en 2024. Hasta hace dos años pagábamos la mitad por metro cuadrado".
También cuestionó el escaso impacto del sector inmobiliario formal sobre la construcción organizada: "Una persona que se hace una casa no contrata una empresa. Lo hace con un amigo arquitecto, un ingeniero y una cuadrilla. Eso no nos mueve la aguja".
Con una mirada crítica pero esperanzada, Martínez cerró con un mensaje claro: "Si un empresario no tiene optimismo, se va. Nosotros nos quedamos en San Juan porque creemos que todavía hay oportunidades. Pero tenemos que trabajar mucho antes de que lleguen, para que cuando vengan, la mesa esté servida".