Ni el viento se quiere perder la Fiesta Nacional del Sol| Abrir nota completa...
Para ver esta nota en internet ingrese a: https://www.diarioelzondasj.com.ar/a/333116
Platense campeón

Guido Mainero, la historia del pibe que iba a entrenar en bici

Guido Mainero autor del gol de triunfo y el título para Platense tiene una historia muy particular vinculada con el sacrificio y el esfuerzo cuando empezó en Córdoba.

Hizo el gol de su vida, el gol que le dio la primera estrella a Platense. Guido Mainero va derecho al salón de la fama del Calamar

Hay historias que no se escriben con tinta, sino con barro, con sudor, con pedaleadas y sueños que parecen imposibles.

Guido Mainero es una de esas historias. Porque no nació estrella: se forjó en la humildad, en la constancia silenciosa de quien sabe que el fútbol no regala nada.  

De chico, cuando todo era ilusión, agarraba la bicicleta y pedaleaba hasta La Agustina, el predio de Instituto. Lo hacía casi como un ritual: atravesar Córdoba cada día para entrenar, con los botines colgando y la ilusión intacta.

Ahí, en ese lugar que huele a potrero y a lucha, Guido dio sus primeros pasos. Se ganó el cariño de sus compañeros y entrenadores, y también el respeto que se le reserva a los que no se rinden nunca.  

Su primera etapa en Instituto fue intensa, llena de entrega. Y cuando volvió para un segundo ciclo, todo parecía alinearse para que la historia tuviera una segunda vuelta feliz.

De cruzar todo Cordoba Capital en bici para entrenar a hacer el gol del primer título de Platense. Guido Mainero entró en la historia grande de Platense Crédito: Gentileza 351

Pero el fútbol, como la vida, a veces no perdona. Ese regreso no fue el soñado: lesiones, decisiones ajenas, caminos que se cierran sin explicación.

Se fue, otra vez con la mochila cargada, pero sin una sola queja. Con la frente en alto.   Y entonces llegó Platense.

Otro desafío, otro escalón. Pocos apostaban por él como figura determinante. Pero el fútbol, otra vez, le dio revancha.

En la final, en el partido más importante de todos, apareció él. Sí, Guido Mainero, el de la bici, el de La Agustina, el que nunca se rindió.

Fue su gol el que le dio a Platense el campeonato. Su gol el que escribió en la historia del club una página eterna.   Su gol, que fue mucho más que una pelota en la red: fue un grito de justicia, un abrazo a todos los días en que pensó que no lo iba a lograr.

Últimas noticias

Ver más noticias