Vecinos de Rawson cortan una calle hartos de la inseguridad
"Es imposible vivir así, ya van tres días consecutivos con robos", lamentó una vecina de la zona que contó que la zona es "tierra de nadie".
La situación de inseguridad que padecen los vecinos del barrio Ampliación Plástico Conjunto 3 Viñedos del Sur, en Rawson, es crítica. Aseguran ser víctimas constantes de robos en sus viviendas y afirman que la zona está "tomada" por delincuentes, lo que les impide vivir en paz. Por este motivo, este miércoles por la tarde, un grupo de vecinos decidió cortar la calle Doctor Ortega y Boulevard Sarmiento, frente a una garita policial, para reclamar más seguridad.
"Por tercer día consecutivo hemos sufrido robos. Esto ya es algo cotidiano; han desvalijado una casa. Estamos cansados y hartos, y nadie nos escucha", señaló Pamela Díaz, una vecina que participó de la manifestación.
Según los testimonios de los residentes, este miércoles un enfermero que llegaba de trabajar a su casa encontró la puerta rota y las pertenencias de su hogar saqueadas. Sin embargo, gracias a que algunos vecinos salieron a perseguir a los ladrones, lograron recuperar un televisor y otros objetos que habían sido robados.
La situación se está tornando cada vez más tensa, ya que los vecinos de la zona se han unido para formar grupos de patrullaje y cuidar sus viviendas. Aseguran que la policía no está haciendo suficiente para protegerlos.
Esto ha generado una escalada de violencia, con fuertes enfrentamientos entre los residentes y los delincuentes. "Nos estamos quejando con los policías, pero ellos están peor que nosotros. Les apedrean la garita, les quieren prender fuego. Estamos todos totalmente desprotegidos", agregó la vecina, quien también relató que días atrás otra casa en la zona había sido desvalijada.
"Es imposible vivir así. Los delincuentes están organizados, conocen nuestros movimientos. Saben a qué hora salimos a trabajar, cuándo volvemos, incluso cuándo regresan los chicos de la escuela. Aprovechan esos momentos para robar. Hace poco le robaron a una mujer que estaba esperando el colectivo", relató.
"Unos días atrás, una mujer llegó a su casa y se dio cuenta de que le habían robado las herramientas. Imaginate que un vecino directamente abandonó su casa por seguridad. Esa casa ahora se ha convertido en un aguantadero. Vivimos colindantes a la villa Monterromaní, y esta es una tierra absolutamente de nadie", agregó la mujer con tono de bronca.
Los vecinos también expresaron su frustración por la falta de atención por parte de las autoridades. "Ningún comisario ni nadie de la policía se ha acercado a hablar con nosotros ni nos ha ofrecido una solución. Estamos totalmente solos y desprotegidos, cuidándonos entre nosotros", señaló.
"Es imposible vivir así. Nos estamos cuidando entre nosotros porque, cuando llegas de trabajar, no tenés nada", lamentó la vecina.
"Es difícil de creer que nadie nos escuche", continuó. Además, reclamó al municipio más obras de seguridad en la zona. La mujer aseguró que han intentado dialogar con el intendente, pero no han podido, y que también han buscado una solución en la Secretaría de Seguridad, sin obtener respuesta. "Esperamos que el comisario se acerque, pero tampoco lo ha hecho. Por eso decidimos cortar la calle, para que alguien nos escuche", concluyó.