Un menor héroe evita un robo: Los Danielitos condenados
Dos delincuentes fueron enjuiciados, uno fue enviado al penal por reincidente, el otro zafó por un robo. Un chico fue clave para evitar que se salieran con la suya.
En la madrugada del 26 de mayo aproximadamente a las 2:28, dos individuos fueron aprehendidos tras robar muebles de una vivienda en Pocito. Los ahora condenados, Elio Daniel Ferreyra, vestido con ropa deportiva oscura, y Maximiliano Daniel Madaf, con ropa gris, ingresaron sin violencia al inmueble y sustrajeron una mesa plástica blanca, una silla plástica negra y una silla metálica negra con base de madera.
Los delincuentes cargaron los objetos robados en una camioneta amarilla marca Dodge. La víctima del robo fue alertada por un menor desconocido y salió de su casa a tiempo para ver a los ladrones con sus pertenencias cargadas en la camioneta. Al confrontarlos y amenazar con llamar a la policía, los agresores detuvieron su marcha y abandonaron los objetos robados en la calle Proyectada, a la entrada del barrio Las Pampas, Pocito. Ferreyra y Madaf destruyeron la mesa plástica antes de huir, pero las sillas fueron recuperadas por la víctima.
Una vecina, dueña de un negocio cercano, fue testigo del incidente y escuchó los gritos de la víctima y el ruido del daño causado por los ladrones.
Tras recibir una llamada al 911, la policía interceptó la camioneta en la Avenida Intendente Uñac (ex calle Mendoza) entre calles 12 y 13, logrando la aprehensión de los delincuentes a las 2:35. Los agentes informaron al Ministerio Público Fiscal, que se presentó en el lugar para llevar a cabo las medidas correspondientes. Ferreyra y Madaf fueron informados de sus derechos y detenidos, permaneciendo en la Comisaría 7 de Pocito.
La condena
El juez resolvió, mediante juicio abreviado, condenar a Ferreyra a dos meses de prisión de cumplimiento efectivo, declarando además su reincidencia y ordenando prisión preventiva. Para Madaf, se resolvió la suspensión del juicio a prueba por un año, con la condición de realizar 100 horas de trabajo no remunerado en nueve meses y pagar una reparación simbólica de $10,000 a la víctima. También se le impuso la prohibición de acercarse a la víctima y a su domicilio a menos de 200 metros, y se le prohibieron actos turbatorios o molestos.
