Crisis financiera en la UNSJ: ¿Hasta cuándo aguantará?
La Casa de Altos Estudios debe afrontar abultados aumentos en energía eléctrica y agua, pero con los mismos fondos del año pasado, que fueron presupuestados en septiembre del 2022. Ya están usando el fondo anticíclico y ya tienen una fecha límite para gastarse lo que les queda de dinero, si n les actualizan las partidas.
La situación en la Universidad Nacional de San Juan (UNSJ) sigue siendo insostenible. Es que comenzaron este 2024 con el presupuesto congelado, o sea el mismo del 2023, que tuvo una inflación del 211,4%. En ese contexto, los incrementos en general, pero principalmente el aumento en las tarifas de la luz, preocupan sobremanera a las autoridades de la universidad, que están tomando medidas para reducir el consumo eléctrico y que ya sienten el golpe de tener que ajustarse con un presupuesto congelado. Si no aumentan esta partida desde Nación, el crédito que tienen alcanza para funcionar hasta junio.
"La situación en la UNSJ es muy parecida a todas las de todo el país porque al prorrogarse el presupuesto de la partida de gasto de funcionamiento es la misma, es decir, 171 millones durante enero y febrero. En marzo otorgaron un aumento del 70% sobre esa partida, que en realidad es de un 5% del presupuesto del año anterior, o sea muy exiguo", detalla Ricardo Coca, secretario administrativo y financiero de la UNSJ, en diálogo con Zonda Diario.
Lo que más le preocupa a Coca es el incremento de la energía que, según señala, ronda entre 600% y 700% en comparación con el año pasado. Para graficar esta situación, hay que tener en cuenta que la tarifa de la energía de marzo del año pasado fue de $7,750,000 y la última que ha llegado de marzo de este año es de $58,800,000.
En este marco, cabe agregar que, en enero del año pasado, la factura de luz era de $6,930,000 y en enero de este año fue de $21,900,000, mientras que en febrero del año pasado fue de $7,550,000 y en febrero de este año fue de $22,800,000.
Los gastos en la energía eléctrica en este momento rondan el 30% de toda la partida de funcionamiento que dispone la universidad
Coca lamenta que los incrementos en la tarifa del agua también hayan sido muy significativos, en el orden del 200%. En cuanto al tema del gas, por ahora están tranquilos porque no ha sido una época de consumo, pero saben que los meses fríos van a impactar mucho.
¿Hasta cuando llegan con este presupuesto?
"Nosotros vamos a hacer funcionar la universidad, pero el tema es que con este presupuesto hay cosas que son importantes, que no se pueden hacer. El crédito que tenemos, se consume hasta el mes de junio (llegan hasta ese mes), esperamos que se sigan aumentando esos créditos para tratar de llegar a diciembre, pero con muchas dificultades y lo ideal sería que se pueda discutir una nueva retribución de partidas", responde el secretario administrativo y financiero de la UNSJ.
El presupuesto de funcionamiento
Coca explica que las partidas de funcionamiento se utilizan para todo: para los salarios de los docentes, para las becas universitarias, para mantener el comedor, para los proyectos de investigación, etc.
Por eso en la casa de altos estudios ya comenzaron una campaña para reducir el consumo eléctrico, para reducir el costo.
¿La UNSJ puede tomar deuda?
"El estatuto lo permite, pero no es nuestra idea. Nosotros siempre nos manejamos con un presupuesto que viene de nación más los recursos propios, nunca hemos pedido deuda", asegura.
Sobre esto, señala que la casa de altos estudios tiene un fondo anticíclico que no alcanza a cubrir una grilla salarial y que esto está invertido y generando ganancias para la universidad y eso ya se está utilizando para paliar la situación del presupuesto. Pero al usar este fondo, se va achicando.
Con la soga al cuello
El Gobierno nacional había prometido un aumento del 70% en una partida de 170 millones que todavía no se ha depositado y en la UNSJ se muestran preocupados porque esto genera problemas con los atrasos de los pagos que la casa de altos estudios debe afrontar. "Por ahí antes se atrasaban, pero tenía presupuestos que eran más amplios. El problema es que este año nos estamos manejando con valores del 2023", agrega Coca.
Cabe destacar que el presupuesto que está utilizando la universidad se elaboró en septiembre del 2022, se ejecutó durante todo el 2023 y continúa congelado, por lo tanto, estiman que ese presupuesto ha sufrido un 300% de inflación sin ser actualizado. En todo el país, las universidades nacionales están en lucha para conseguir los fondos que les permitan seguir funcionando.