UPD: La noche de descontrol que vivieron cientos de chicos en San Juan

Imagen ilustrativa.

Desde hace varios años en la provincia se viene celebrando con el inicio del ciclo lectivo el tradicional UPD, Último Primer Día, un festejo de los alumnos de secundaria que cursan su último año. Cabe destacar que previamente al inicio de clases realizan fiestas, reuniones o festejos donde se consume alcohol, se baila y al otro día suelen asistir con resaca a clases.

Según el jefe de policía Eduardo Lirola en diálogo con Zonda Diario, "Previa todo esto tuvimos información en la cual chicos de entre 16 y 17 años de diferentes institutos escolares y van a ser el festejo del último primer día y habían alquilado algunos lugares como quintas o casas para festejar este evento".
El lunes pasado, "en Pocito " tuvieron que desalojar una quinta que tenía más de 80 menores y no había ni un solo mayor, la mayoría ya estaban en el estado de ebriedad y dos de ellos estaban bajo los efectos del alcohol y tenían principio de intoxicación, por lo que tuvieron que trasladarlos al hospital para la respectiva atención. Situaciones similares ocurrieron en Caucete y en 25 de Mayo.

El mismo día, "volvimos a trabajar en Pocito desalojamos una quinta con 200 chicos, también trabajamos en Caucete, en 9 de Julio y en diferentes fincas donde los menores, acompañados por diferentes adultos, se juntaron a beber bebidas alcohólicas. Había chicos de entre 15, 16 y 17 años".

El lunes en la madrugada la policía tuvo que desalojar una quinta que tenía más de 80 menores y no había ni un solo mayor. La mayoría ya estaba en estado de ebriedad y dos de ellos estaban bajo los efectos del alcohol y tenían principio de intoxicación, por lo que tuvieron que ser trasladados al hospital para la respectiva atención. Situaciones similares se vivieron en Caucete y en 25 de Mayo.

Durante la madrugada de este miércoles la policía tuvo una noche bastante movida, ya que hizo operativos en distintos lugares. De acuerdo a la legislación en vigencia, los menores son entregados en el lugar a los padres, por lo tanto, se les pidió que llamaran a sus padres para hacer entrega de los menores. En todos los casos se han hecho actas de infracción y, por lo tanto, expedientes contravencionales con intervención del juzgado de paz letrado de Caucete y también en Capital, donde ha estado actuando el segundo juzgado contravencional. En algunos lugares se han clausurado las quintas donde se habían realizado estos eventos.

Padres fomentaron estos eventos

El jefe de policía se mostró molesto porque "en todos los casos se ha notado que los papás o las personas mayores llevaban a los hijos o familiares a estos sectores para que se divirtieran supuestamente. Pero había mucho alcohol. Entendiendo como adultos que al día siguiente, o sea este miércoles, tenían que ir a la escuela".

"Nosotros hicimos lo que corresponde que es entregarle a los padres sus hijos para que ejerzan la patria potestad. Además, hicimos operativos de tránsito para saber que esta gran cantidad de autos que se desplazaron en los eventos no generaron accidentes de tránsito", comentó Lirola, con el foco puesto en el gran trabajo que la Policía tiene que hacer por esta situación.

"Tuvimos que hacer operativos dentro de la motorizada, los móviles, los patrulleros municipales y entre diferentes unidades operativas hicimos un gran trabajo de prevención", agregó el funcionario policial.

La reflexión de Lirola y el mensaje directo a los papás

"Creo que los papás tenemos la responsabilidad de la educación para que las escuelas formen. Yo no sé si los papás están conscientes de que estamos enfermando psicológica y físicamente a los chicos que a menor edad consumen alcohol. No tenemos que sugerirles estos eventos. Los papás tienen que saber que los diferentes boliches con forma de legislación tienen la posibilidad de hacer matinés que terminan a las 22:30 horas y en la cual se los controla para que no consuman bebidas alcohólicas y no fumen. No estamos hablando de una diversión sana con música donde se puede bailar, reír, jugar y todo tipo de actividad sin presencia de alcohol y de cigarrillo, esto está previsto en la ley y estos lugares están autorizados por este tipo de eventos. Nuestro trabajo ha sido para evitar que los niños lleguen a la escuela a su primer día de clase bajo los efectos del alcohol", comentó el jefe de la policía, molesto con la actitud de los mayores que fomentan estos eventos.

Lo que sí hay que fomentar para el jefe de Policía

"Con todo respeto hacia los padres, creo que tenemos que fomentar las actividades deportivas y culturales, los chicos se pueden divertir, pero sin usar el alcohol cómo se hacía antes. Nosotros somos protectores de la vida no queremos faltar el respeto a los papás, pero le solicitamos la colaboración para que los menores de edad sean educados en el marco de la ley para que puedan desarrollarse sanos y fuertes en esta cuestión de la escuela y que puedan ser unos buenos ciudadanos", reflexionó Eduardo Lirola tras el trabajo realizado esta semana.