El Superclásico que se jugó en la mañana por culpa de Reutemann
El Boca- River por el Interzonal del Torneo Nacional se jugó a las 10.30 de la mañana porque en horas de la siesta se corría el Gran Premio de Fórmula 1, en donde Carlos Reutemann se podía consagrar campeón del mundo.
El próximo domingo el Superclásico del fútbol argentino, el partido que paraliza a el país, se jugará en un horario poco habitual para un partido de esta naturaleza, a las 14. Este cambio se debe a que en horas de la noche se desarrollará el primer debate presidencial en Santiago del Estero y el objetivo es que existan varias horas de diferencia entre ambos acontecimientos, para que el post partido del Boca- River no interfiera a las propuestas de los presidenciables.
Sin embargo no es la primera vez que el horario de un Superclásico se modifica por otro acontecimiento de gran importancia para los argentinos. En 1981 y por culpa de Carlos Reutemann, que en ese entonces peleaba el campeonato mundial de Fórmula 1, el duelo entre Xeneizes y Millonarios por el Interzonal del Torneo Nacional se disputó a las 10.30 de la mañana.
El cambio de horario se produjo más allá de que ese Superclásico tuvo un plus, ya que Boca tenía en sus filas a Diego Maradona, en esos años, no una promesa, sino el mejor jugador del fútbol argentino, mientras que en River jugaba Mario Alberto Kempes, la gran figura de la Selección Argentina que ganó el título mundial en 1978.
Argentina Televisora Color (ATC), la emisora estatal que transmitía tanto el fútbol argentino como la Fórmula 1 a través de canales y repetidoras de todo el país, pidió cambiar el horario del partido que se jugó en La Bombonera debido que a las 15.15 horas, Carlos Reutemann podía consagrarse campeón de la máxima categoría del automovilismo mundial en el Gran Premio de Canadá, la penúltima competencia de la temporada de 1981, y un gran número de argentinos seguían a través de la pantalla de TV la gran campaña del Lole.
Fue un Superclásico especial, no solo por el horario en el que se jugó, sino también porque Boca se había consagrado en el Torneo Metropolitano y River buscaba llevarse este nuevo campeonato, por tal motivo reemplazó en el banco de suplentes a Ángel Labruna por otro técnico de la casa, Alfredo Di Stéfano.
Esa mañana, en La Bombonera, la hinchada de River colgó un trapo gigante en el que se podía leer: "41-42-45-47-52-53-55- 56-57 Gracias, Angelito! 1975-77-79-80", en homenaje al Feo Labruna, el gran ídolo Millonario, que había sido echado meses atrás del club por el presidente Rafael Aragón Cabrera.
El encuentro fue de ida y vuelta, con grandes atajadas de Fillol y Gatti. A los 20 minutos, Boca abrió el marcador. Desde un ángulo muy cerrado, Maradona la clavó en el primer palo del arco del Pato, que se sorprendió ante el remate del Diez.
La igualdad de River llegó a los 19 minutos del complemento cuando un tiro libre ejecutado por el "Matador" Kempes se coló por abajo a Gatti. Cuatro minutos más tarde, Krasouski derribó en el área a Kempes, que había recibido un pase de Alonso. Passarella lo pateó y puso al Millonario en ventaja.
A los 35 minutos llegó el tercero de River, luego de una gran jugada del lateral Jorge García que, tras recibir un pase de Alonso, ingresó al área en diagonal, dejó en el camino a un par de defensores y a Gatti, definiendo como un delantero.
Dos minutos después, con un fuerte remate, descontó Gareca para el local, que fue en busca del empate. Cuando se jugaba tiempo adicional, Fillol selló la victoria Millonaria por 3-2 luego de sacarle un tiro libre a Miguel Brindisi sobre la hora.
Finalizado el encuentro que sirvió como aperitivo, los argentinos aprovecharon para almorzar y esperar, a la hora de los postres, la competencia de Fórmula 1, en donde Reutemann, a bordo de un Williams, terminó en la décima posición, y su máximo rival, el brasileño Nelson Piquet con Brabham, finalizó quinto y quedó a un punto del piloto santafecino en el campeonato de pilotos a la espera de lo que sucedería en la última carrera en Las Vegas. Pero esa es otra historia y con un final no tan bueno para el Lole y todos sus seguidores.
Síntesis:
Boca: Hugo Orlando Gatti; José María Suárez, Oscar Ruggeri, Roberto Mouzo, Carlos Córdoba; Jorge Benítez, Ariel Krasouski, Diego Maradona; Osvaldo Escudero (Miguel Brindisi), Ricardo Gareca y Hugo Perotti. DT: Silvio Marzolini.
River: Ubaldo Fillol; Eduardo Saporiti (Julio Olarticoechea), Claudio Giúdice, Daniel Passarella, Jorge García; Enzo Bulleri, Américo Gallego, Norberto Alonso; Ramón Díaz. Mario Kempes y Emilio Commisso (González).
Goles: 20m Maradona (BJ), 64m Kempes (RP), 68m Passarella de penal (RP), 80m Jorge García (RP) y 82m Gareca (BJ).
Árbitro: Arturo Andrés Ithurralde.