Cuatro provincias recibieron fondos de ATN en medio de la tensión con gobernadores: ¿Está San Juan?
El Gobierno ha decidido transferir $12.500 millones en Aportes del Tesoro Nacional a cuatro provincias, a pesar de las tensiones con los gobernadores tras el veto a la ley que reformaba la distribución de dichos fondos.
En un escenario marcado por el conflicto entre el Gobierno nacional y los mandatarios provinciales, la administración central llevó a cabo el pasado viernes la transferencia de $12.500 millones en Aportes del Tesoro Nacional (ATN) a cuatro provincias, en un acto que ha suscitado múltiples interrogantes sobre la motivación detrás de esta decisión.
De acuerdo con un análisis realizado por la consultora Politikón Chaco, los fondos se distribuyeron de la siguiente manera: Misiones recibió $4.000 millones, Entre Ríos $3.000 millones, Santa Fe $3.000 millones y Chaco $2.500 millones. Este reparto se produce en un contexto de tensión, dado que hace poco el Gobierno vetó una ley que proponía una reforma en la distribución de los ATN, lo que acentúa la controversia sobre la utilización de estos fondos.
El informe de la consultora señala que, aunque las razones de emergencia que justifican estos envíos aún no han sido esclarecidas, es notable que la cantidad transferida supera ampliamente los $3.000 millones que se habían enviado durante el mes de agosto. Esta situación suscita la necesidad de un análisis más profundo sobre las implicancias políticas y económicas de esta medida.
Entre Ríos se posiciona como la provincia más beneficiada, recibiendo un ATN en agosto y otro en septiembre, acumulando un total de $6.000 millones en los últimos dos meses. Este hecho coincide con una alianza electoral entre el oficialismo provincial y nacional, donde los candidatos de La Libertad Avanza lideran las listas de diputados y senadores, lo que sugiere que el otorgamiento de estos fondos podría tener una lectura electoral.
Por su parte, Chaco también se beneficia en este contexto, dado que los candidatos de La Libertad Avanza están en alianza con el oficialismo local. Esto refuerza la idea de que la distribución de los ATN podría estar influenciada por consideraciones políticas más que por necesidades urgentes de financiamiento.
En contraste, los casos de Santa Fe y Misiones presentan una dinámica diferente. Estos territorios no fueron convocados a la reciente Mesa Federal organizada por el Gobierno, y sus gobernadores han expresado críticas hacia la gestión oficial. La ausencia de alianzas electorales en estas provincias resalta la disparidad en la distribución de los ATN, lo que podría llevar a una mayor polarización en la relación entre el Gobierno y los gobernadores.