"Me pegó un cachetón en la nuca y dijo ‘negro de mierda’": el testimonio del jugador tras ser liberado
Matías Orihuela denunció que fue agredido física y verbalmente por policías en Mendoza durante un control vehicular. "Solo quería que mi hija conociera la nieve", expresó.
Ayer jueves, se realizó en Mendoza la audiencia de control jurisdiccional en la que se resolvió la libertad del futbolistaMatías Orihuela, jugador de San Martín de San Juan, quien se encontraba detenido tras un incidente con personal policial en la zona de Potrerillos, Luján de Cuyo.
El juez dispuso la libertad bajo caución de 10 millones de pesos, mientras avanza la investigación en su contra por presunto ataque a la autoridad. En la audiencia, celebrada en el Polo Judicial Penal, estuvieron presentes el fiscal Correccional Gustavo Stroppiana y los abogados defensores Carlos Moyano, Nicolás Camani y Alejandro Aruani.
Orihuela está acusado de haber agredido a un efectivo policial durante un control vial. Sin embargo, el jugador brindó su versión de los hechos en una entrevista radial con un medio mendocino, donde denunció abuso de autoridad y violencia por parte de uno de los oficiales.
"Venía con mi familia a hacer turismo. Quería que mi nena conozca la nieve y pasar un día hermoso. Cometí una infracción, pasé una doble línea amarilla y lo reconocí. Una oficial me trató muy bien, me explicó que tenía una multa, la acepté. Pero luego apareció otra policía, golpeó el vidrio de mi camioneta, me gritó y me empujó sin razón hasta el móvil policial", relató.
Según Orihuela, la situación se tornó agresiva rápidamente: "Me hicieron una requisa, me pegaron en la nuca, me insultaron con frases como ‘negro de mierda’ y ‘levantá la mano, gil’. Yo le dije que era jugador de fútbol no para ‘sacar chapa’, sino para pedir que no me lastime. Vivo de esto. Si me lesionaba, ¿quién se hacía cargo?", expresó.
También sostuvo que en ningún momento amenazó con contactos en la AFA, como se sugirió en algunos medios. "Jamás dije eso. Solo mencioné que era futbolista por mi integridad física. Me trataron de ignorante, se burlaron de mí. Todo esto frente a mi hija, que se estaba descomponiendo del susto", denunció.
El jugador también indicó que le retuvieron la documentación de la camioneta y su licencia, y que uno de los policías habría intentado influir en un testigo ocasional para respaldar su versión.
