Israel y Siria alcanzan una tregua tras una semana de enfrentamientos
Estados Unidos, Turquía y Jordania fueron claves en la mediación. El conflicto dejó cientos de muertos y profundizó las tensiones étnico-religiosas en la región de Sweida.
Luego de una escalada de violencia que se extendió durante varios días y dejó un saldo de cientos de muertos, Siria e Israel alcanzaron un acuerdo de alto el fuego impulsado por la diplomacia internacional. La tregua fue confirmada por el embajador estadounidense en Turquía, Tom Barrack, quien aseguró que los líderes de ambos países aceptaron cesar las hostilidades.
El presidente sirio Ahmed Al-Sharaa y el primer ministro israelí Benjamin Netanyahu habrían dado su visto bueno a la iniciativa, que contó con el respaldo de Estados Unidos, Turquía, Jordania y otros países vecinos. Según detalló Barrack en redes sociales, el secretario de Estado norteamericano, Marco Rubio, fue uno de los principales promotores del cese al fuego.
"Instamos a drusos, beduinos y musulmanes suníes a deponer las armas y sumarse a la construcción de una Siria unificada y en paz", expresó el diplomático, en alusión a los actores que protagonizaron los enfrentamientos más cruentos en la provincia siria de Sweida, bastión histórico de la comunidad drusa.
El conflicto se había encendido el domingo, cuando se desataron choques armados entre milicias drusas y tribus beduinas de mayoría sunita. La intervención del ejército sirio, presuntamente para pacificar la zona, fue interpretada por los drusos como una toma de partido en favor de los beduinos, lo que detonó la reacción israelí.
Israel, que también alberga una importante comunidad drusa en su territorio —muchos de ellos integrantes de sus fuerzas armadas—, respondió con bombardeos sobre posiciones militares sirias en el sur del país y en pleno centro de Damasco, donde incluso fue atacada la sede del Ministerio de Defensa.
Durante los cuatro días de enfrentamientos se reportaron no solo muertes masivas, sino también denuncias de ejecuciones sumarias y saqueos a poblaciones drusas. La violencia provocó el desplazamiento forzoso de cientos de civiles que huyeron en busca de refugio.
Aunque la tregua fue anunciada oficialmente este viernes, la situación en el terreno seguía siendo frágil. La noche del jueves aún se registraban ataques de represalia entre grupos drusos y comunidades beduinas. Mientras tanto, el gobierno sirio se preparaba para desplegar tropas en Sweida, pero anunció un retraso en el operativo justo antes de que se oficializara el acuerdo.