La reina mundial del hockey sobre patines
El domingo pasado terminó la Copa de la Reina en España y allí se la vio por última vez en una pista de hockey sobre patines a Adriana Gutiérrez que desde Lleida, España contó como vivió ese momento y resumió su historia de vida.
La bocha iba pegada al stick, patinando como siempre agachada y mirando hacia adelante. Fue solo un instante y de reojo miró el reloj 1m. 25s. le faltaban al partido. Atacó por el centro, hizo la gambeta y se la dejó servida a su compañera para que hiciera el gol.
Respiró profundo y supo en ese momento que vivía algo único. El partido se terminaba, al mismo tiempo que su carrera deportiva llegaba al final.
En ese instante Adriana Gutiérrez sintió el abrazo de sus compañeras. La victoria se consumaba y el tercer puesto era para el Esneca Fraga.
Por su mente empezaron a pasar imágenes, desde que se puso los patines extensibles en el Centro Valenciano, su primer partido oficial, su primer gol, su primera convocatoria en primera, la primera vez que se puso la albiceleste, su primer viaje a Europa…
"Son muchos años, 32 jugando al hockey sobre patines y creo que me voy en el momento justo. Hice todo lo que deseaba y lo que una jugadora sueña. Conseguí muchos títulos pero eso no estan tan importante como haber dejado una buena imagen en el lugar que me tocó estar. Gracias al hockey conocí a mucha gente pero lo mas importante me permite tener amigos en todos lados"

Adriana está radicada en la zona de Lérida en la provincia de Cataluña, en España y allí hoy tiene un proyecto para continuar que no está vinculado con el deporte.
"Cuando terminé la secundaria, hice el profesorado de inglés en la facultad de filosofía. Sabía que el hockey no dura para siempre había que tener una salida laboral y hoy esto dedicada a eso. Trabajo en una editorial trabajando de lo que mis estudios me dieron" cuenta Adriana.
La jugadora nacida en la cantera de Centro Valenciano ha escrito una historia en el deporte en el cual no solo se cuentan sus goles, sus asistencias, sus títulos sino que también ha dejado una imagen como ser humano increíble que se avalan en cada club en el que estuvo.
"Hoy miro atrás y veo que he cosechado muchas amistades, en Francia, España, Italia, Japón, en San Juan y en la Argentina. Eso lo rescato y agradezco al hockey porque me permitió caminar por el mundo defendiendo camisetas y levantando la bandera argentina y me enorgullece"
A los 40 años todavía tiene mucho mas para dar y para jugar, pero Adriana decidió poner punto final a su carrera y también tiene decidido que será de su vida.
"Me alejo del hockey, al menos por un tiempo. Necesito desintoxicarme un poco y apostar por otros proyectos, como el laboral donde estoy y ya llevo muchos años en Europa y estoy bien aqui"
Esa noticia es aceptada a medias por sus familiares en San Juan que esperaban por una chance de radicarse definitivamente en la provincia. Gladis su mamá acompañó a Adriana en todo el proceso, desde que empezó hasta que se despidió la semana pasada.

"Cuando mire la tribuna en el partido, ella estaba alli. Así como lo hizo en mis 32 años de carrera. Con ella llegué de la mano al primer entrenamiento. En un bolso me llevaba los patines extensibles para ponermelos.Hubiera dado la vida por que mi papá también me viera jugar, pero falleció cuando yo tenía cuatros. Me hablaron de que le gustaba el deporte y creo que hubiera estado feliz de verme"
De pronto un silencio se produce en la llamada. Obviamente hay emoción y los recuerdos fluyen para Adriana Gutiérrez pentacampeona con la selección Argentina.
El repaso a sus títulos deportivos es largo y amplio, porque no solo ganó campeonatos argentinos en inferiores con la camiseta de Valenciano, sino que cuando le tocó viajar a Portugal, Italia, España, Francia ganó todo lo que jugó.

"Es dificil poder elegir un momento de mi carrera como especial, pero claro que es muy emotivo jugar con la camiseta de la selección, ganar cinco mundiales pero nada se compara como jugar en casa como el Cantoni con miles de sanjuaninos alentando y gritando campeón"
La charla con Adriana se extiende apenas un par de minutos mas. Ya salió de su trabajo y una jornada mas se termina. Rumbo a casa recorre imagenes y recuerda anècdotas de su enorme carrera.
"A pesar de chiquita, me voy con la frente en alto. Siempre di todo, me la jugué por completo por cada camiseta que defendí. A la 8 la transpiré tanto como a la 5 de la selección. A la 2 de mis comienzos o a esta última 85 del Fraga" remarcá Adriana de su números de camisetas.
Si de camisetas se trata, Adriana es muy prolija y su madre es muy ordenada, por eso guarda una camiseta de cada club donde estuvo como un tesoro, un recuerdo y una patinada en su vida.
"Mi mamá me guarda las medallas y trofeos que gané con Valenciano. También tiene todas mis camisetas del Cerdanyola CH, Sporting Clube de Portugal, CP Voltregà, CHP Sant Feliu de Codines, Girona CH, Noisy Le Grand y del Esneca Fraga"
La pregunta se cae de madura pero su respuesta segura termina con cualquier especulación.
"¿El Bolso de hockey? está en casa. Cuando terminé el último partido lo dejé en una habitación. No lo tengo a la vista siempre.Deje todo en orden, las botas limpias, las rodilleras y los guantes bien acomodados. Pero no para que esten listos y salir a patinar, hoy también les toca descansar a ellos y quedaran guardados como mis hermosos recuerdos del hockey".
... el partido se termina y otra vez mira el reloj, ya no esta agazapada como para marcar o para salir encarando hacia el arco rival. Se afloja un poco y las imagenes fluyen por su mente, Gladis llevandola de la mano, Antonio mirando desde el cielo, su hermana con sus sobrinos aplaudiendo, la barraca, las Aguilas, un relato de gol de Dante Gómez, una medalla conseguida, un trofeo levantado, cientos de rivales y muchas compañeras, goles, lesiones, lagrimas y sonrisas....
La chicharra suena desde la mesa de control, contiene las lágrimas y sonrie sabe que la tarea está terminada y que su misión ha concluido con éxito al dejar el sello mundial de Reina del Hockey Sobre patines: Adriana Gutiérrez.