La trágica historia del circuito donde correrá Colapinto
El Autódromo Enzo e Dino Ferrari fue testigo de dos de los episodios más tristes en la historia del automovilismo.
El Autódromo Enzo e Dino Ferrari, más conocido como circuito de Imola, en donde el argentino Franco Colapinto volverá a correr en la Fórmula 1, fue testigo de uno de los episodios más tristes en la historia del deporte.
El regreso de Colapinto a la Fórmula 1 será en el GP de Emilia-Romaña, donde se vivió uno de los fines de semana más oscuros en la historia del deporte, directamente relacionado con Senna, uno de sus ídolos.
Para esto hay que retroceder 31 años en el tiempo. Más específicamente al fin de semana del 29 y 30 de abril y del 1° de mayo, cuando se llevó a cabo el GP de San Marino 1994.
Todo comenzó de la peor manera el 30 de abril, cuando durante la clasificación el piloto austríaco Roland Ratzenberger, del equipo Simtek, no pudo doblar en la curva Villeneuve y su monoplaza chocó prácticamente de frente contra una barrera de hormigón, provocando su muerte al instante producto de una fractura en la base del cráneo.
El domingo no fue la excepción, ya que durante la largada se dio un tremendo choque en el que volaron partes de monoplazas, neumáticos y hasta se registraron nueve espectadores con heridas leves.
Dos vueltas después de que se retirara el auto de seguridad, Senna se salió de la pista en la curva Tamburello cuando iba a 305 kilómetros por hora e impactó de manera brutal contra un paredón de cemento, perdiendo su vida.