Crece la presencia de productos importados en el comercio de San Juan
En un contexto de sinceramiento económico, crecen las importaciones en los negocios locales. El comerciante se adapta para sobrevivir en un mercado que exige precios competitivos, mientras la carga impositiva y el costo de vida siguen presionando
El comercio sanjuanino atraviesa una etapa de cambios profundos. Tras años de caída sostenida en las ventas, el rubro intenta reacomodarse en un contexto económico complicado que, con el cambio de gobierno, ha sincerado variables como la inflación, el precio de los servicios y la carga impositiva. En medio de ese reacomodamiento, comienza a ganar protagonismo un fenómeno cada vez más visible: el crecimiento de los productos importados en las góndolas locales. Todo esto está dado porque los países limítrofes son más baratos que la Argentina, razón por la cual la gente opta por viajar y hacer sus compras.
Carlos Iramaín, vicepresidente de la Federación Económica de San Juan, lo describe sin rodeos:
"El comercio viene complicado hace muchos años, no de ahora, y hemos ido en caída. Hoy se está viendo, como se dice, hemos hecho con el nuevo gobierno una caída muy brutal en la cual se ha sincerizado el comercio en la actividad en general, realmente, y hemos empezado un crecimiento. El crecimiento es muy lento, como todo crecimiento no es de un día para el otro", reflexiona.
En este contexto, los comerciantes locales enfrentan un fuerte desafío: seguir a flote en un mercado donde los costos no dan tregua.
"Es muy difícil poder salir, y para el comerciante más todavía, que tiene que pagar los impuestos, alquileres... Todo sube, pero ya no en la forma que venía subiendo anteriormente", explica Iramaín. Y agrega: "En estos momentos el comercio se va recuperando, pero falta mucho todavía".
Uno de los factores que más impacta en los costos es el incremento de los servicios y los tributos.
"Eso fue uno de los componentes que se sinceraron, pero que en realidad se constituyó en el bolsillo del comerciante. Realmente los impuestos impactan, es uno de los tantos ítems que impactan, al igual que los alquileres. La mercadería también ha subido, no en la forma que venía haciendo, pero es un impacto importante, todo lo que es impuesto, todo lo que es servicio también", afirma.
Frente a este escenario, muchos comerciantes sanjuaninos han comenzado a mirar hacia el exterior en busca de productos más competitivos en precio y variedad.
"Sí, mirá, todo lo que es importado... muchos comerciantes están saliendo justamente a importar, porque tienen que competir con los países limítrofes, con Chile justamente, o Bolivia, que es donde traen mercadería la gente o los pequeños empresarios, pequeños emprendedores, como se les dice", describe Iramaín.
La falta de industrias en San Juan ha hecho que este fenómeno no afecte directamente a la producción local, pero sí tiene consecuencias sobre el mercado nacional.
"Hoy creo que no tenemos prácticamente fábricas acá en San Juan, en la cual no le va a afectar prácticamente. Donde afecta es a Buenos Aires, donde están las fábricas realmente, Rosario, Mendoza, que son las provincias donde se fabrican los productos. A ellos sí lo va a impactar muy directo", asegura.
"Pero al comerciante que es intermediario, comprarle o importarle lo mismo, nomás que hay que empezar a aprender que lo más importante es cómo importar, cómo realizar, unirse entre varios comerciantes y poder importar y poder competir", remarca.
Sobre el volumen de importaciones, Iramaín advierte que no se dispone de cifras exactas, pero que el impacto ya se siente con fuerza en la calle.
"El crecimiento es muy importante. No tenemos un número fijo, porque largar un número así al tun-tun tampoco sirve, pero sí ha impactado en el comercio, inclusive la gente que ha viajado como turismo, las vacaciones, ha comprado en los países justamente donde salían, y se han vestido, donde han traído útiles escolares… Todo eso impacta el comercio directo", detalla.