Echan al embajador en España y al cónsul en Nueva York

El Gobierno echa al embajador en España, Roberto Bosch, y al cónsul en Nueva York, Pablo Piñero Aramburu, por diferencias con la actual gestión en Cancillería a cargo de Gerardo Werthein.

Ambos diplomáticos habían sido designados durante la administración de Alberto Fernández y hasta el momento permanecían en el cargo por decisión de la excanciller Diana Mondino, quien no hizo grandes recambios del personal que estaba vigente.

Bosch era el segundo de Ricardo Alfonsín cuando el radical estuvo al frente de la representación argentina en el país europeo y, tras el arribo de los libertarios, si bien se expulsó al hijo del ex presidente, se mantuvo al resto de la planta y se ascendió a quien hasta hoy manejaba las relaciones con Madrid.

El caso de Pablo Piñeiro Aramburu es distinto. También diplomático, efectivizó su traslado a Nueva York en junio de este año. "Lo condenó la fiesta de Halloween", señalaron distintas fuentes de la Casa Rosada.

Sucede que el último 31 de octubre, emblemática fiesta de celebración de Halloween, el consulado argentino en aquella ciudad celebró con un importante evento que cayó muy mal en el Gobierno en un contexto de ajuste y achicamiento.