Trabajador a la deriva y allegados en acción para ayudarlo

El año no arrancó de la mejor manera para un trabajador muy querido del departamento de Rivadavia. Un incendio, que derivó en una violenta explosión, dejó literalmente en la calle. Se trata de Eduardo Martínez, quien dedicó gran parte de su vida a la venta de garrafas y que tenía su depósito en inmediaciones de calle Almirante Brown y Av. Benavidez. Sin embargo, de un día a otro, las llamas arrasaron con años de trabajo. 

En diálogo con Zonda Diario, el hijo del damnificado, Matías Martínez cuenta que su padre se encuentra en buen estado de salud, pese a haber sufrido un estado de shock por lo que fue asistido en el Hospital Dr. Guillermo Rawson. "Lo llevaron a la guardia porque le había subido el azúcar y la presión. Por suerte, no hubo nadie herido ni muertes, eso se valora muchísimo", destaca Martínez hijo. 

Pese a ello, del negocio de su padre no quedó absolutamente nada. "Está en ruinas. Ayer se acercó el intendente, Sergio Miodowsky, quien se puso a disposición", destaca. 

En ese sentido, Martínez sostiene que posiblemente deban derrumbar el lugar, ya que el daño estructural que sufrió el inmueble, tras la explosión, genera un peligro inminente para quienes transiten por la zona. "Es una calle muy transitada y hay muchos niños", advierte. 

Toda una vida, en ruinas

Con este panorama, Martínez expresa que todo el trabajo que desempeñó su papá, durante toda su vida, "quedó deshecho". 

"El fuego fue impresionante, hasta alcanzó la casa de una vecina que también tiene un negocio. Lamentablemente, las llamas alcanzaron ese lugar y, también, su local quedó sin nada. Por suerte, su casa está bien, pero el negocio quedó destruido", detalla. 

Eduardo Martínez tenía un pequeño reparto de gas, que distribuía en negocios de zonas de Chimbas y Rivadavia. Cabe destacar que, al realizar repartos, casi nunca dejaba garrafas en el lugar. "Justamente, este fin de semana, el día sábado, se recargaron todas las garrafas porque iba a haber un aumento en enero. Entonces, los clientes les dieron las garrafas a mi papá para que pudiera recargar todo eso y repartirlas con los nuevos precios. Lamentablemente, esas garrafas estuvieron acá cuando sucedió el accidente y fueron parte para que sea tan intenso el incendio". relata el hijo de la víctima. 

Toda su vida, Eduardo se dedicó a este trabajo, pero ahora quedó en la deriva. "El negocio, también, tenía venta de bebidas y mercadería", añade el hijo. 

"Perdió todo, hasta una moto que hace poco pudo adquirir", lamenta. 

Sus hijos, al pié del cañón

Luego del lamentable hecho, sus dos hijos están atentos a todo lo que pueda ocurrir. Matías fue el primero en estar y, en estos momentos, convive con él, tras la pérdida de la casa. Además, el otro hijo, que reside en Iglesia y trabaja en minería, pudo viajar hasta la Ciudad, también, para ponerse a disposición de su papá.

"Ahora, puede estar en casa conmigo, mientras vemos qué hacemos", enfatiza Matías a este medio. 

Ante todo este panorama, amigos de la familia se pusieron a disposición  e iniciaron una campaña solidaria. "Por suerte hay mucha gente solidaria en San Juan y de a poco van aportando. Por lo menos para empezar muy de a poquito va a servir todo. También ha habido campaña de ropa, porque todo quedó en cenizas. Está buenisimo lo que están haciendo los amigos, los medios, para ayudar a difundir, porque suma un montón, hasta palabras de aliento. Estamos agradecidos de eso", comenta. 

Movida solidaria

Un grupo de amigos apela a la solidaridad para Eduardo Martínez. En diálogo con Zonda Diario, Liliana Olguín, una de las encargadas de la prescindible ayuda, cuenta que se conmovió por lo ocurrido. "Era su única fuente de ingreso y ha perdido absolutamente todo, incluso la casa. Eduardo tiene solamente lo puesto", contextualiza. Por ese motivo, reciben cualquier tipo de donación para que el damnificado pueda salir adelante.

"Todo sirve, porque no tiene nada, no tiene heladera, no tiene cocina, no tiene cama, no tiene ropa, la poca plata que tenía se prendió fuego", expone. 

Liliana se dispuso a buscar algunas donaciones, por lo que se pueden comunicar al 2644835092, para coordinar. 
Para colaborar podés donar:

- Ropa: remeras y abrigos Talle 6; pantalones talle 44 y calzado talle 40/41
- Dinero: a través de Mercado Pago, directamente a la cuenta de Eduardo Martínez (alias: eduardo.martinez.14).