Cómo hará la provincia para lograr un futuro sostenible
El gobierno y la UNSJ trabajan en una ambiciosa política de Estado para reducir la huella de carbono de empresas e instituciones. Los comercios pequeños como kioscos o almacenes podrán sumarse. Además, habrá grandes beneficios para quienes logren certificarse.
Esta semana el Gobierno presentó el ambicioso "Programa San Juan Carbono Neutral 2050", una iniciativa liderada por la Secretaría de Estado de Ambiente y Desarrollo Sustentable, en conjunto con la Dirección del Centro de Educación e Investigación Ambiental Anchipurac. El programa tiene como objetivo central reducir significativamente las emisiones de gases de efecto invernadero y avanzar hacia la neutralidad de carbono para el año 2050.
La primera fase del programa contempla una amplia convocatoria dirigida a empresas, instituciones, organizaciones y ciudadanos interesados en contribuir activamente a la lucha contra el cambio climático. La participación es clave para llevar adelante el plan de acción propuesto por el Gobierno de San Juan, y así lograr un impacto positivo en la preservación del medio ambiente y la promoción de prácticas más sostenibles.
Una vez adheridos al programa, los participantes serán sometidos a una medición rigurosa y exhaustiva de la Huella de Carbono. Este paso es esencial para determinar la cantidad exacta de emisiones de gases de efecto invernadero que cada entidad produce y su contribución al cambio climático.
Claudia Agnelli, directora de Anchipurac, dialogó con Zonda Diario y se mostró contenta ya que "ya se sumaron unas 11 empresas sanjuaninas del ámbito privado y más de 10 instituciones gubernamentales de distintos ministerios". Agnelli también subrayó que el programa marca una política de Estado frente al cambio climático, alineándose con los acuerdos internacionales de París y Tokio, y destacó la importancia de sumar actores de todas las áreas interesados en contribuir.
En el marco de la tercera fase del programa, se elaborará un plan de reducción y mitigación de emisiones personalizado para cada participante. El objetivo es que todas las entidades involucradas trabajen activamente para disminuir sus emisiones y se comprometan con la preservación del ambiente. El respaldo de la Facultad de Ingeniería de la Universidad Nacional de San Juan aportará su conocimiento para encontrar soluciones sostenibles y avanzar hacia un desarrollo más respetuoso con el medio ambiente.
La importancia económica de sumarse
No solo se trata un tema de medioambiente, que es lo más importante de la cuestión, sino que para impulsar a las empresas a que se sumen hay beneficios que pueden repercutir en la economía de las mismas. "Cada unidad de comercio que participe de la etapa 1 obtendrá un certificado de sustentabilidad. Esto permitirá mejorar sus condiciones para acceder a licitaciones, préstamos y programas industriales", explicó Agnelli, enfatizando el impacto positivo que el programa tendrá en el sector privado. Además, se espera un mayor prestigio empresarias para quienes lo logren.
El compromiso del "Programa San Juan Carbono Neutral 2050" es a largo plazo y representa una apuesta hacia un futuro sustentable para la provincia. Si bien el camino es desafiante, la unión de esfuerzos y la participación activa de todos los actores involucrados son clave para alcanzar los objetivos establecidos. Agnelli espera un fuerte trabajo en los primeros 5 años de esa política de estado para que la gran mayoría de entidades se sumen a la lucha contra el cambio climático.
Dos hechos para tener en cuenta
El Protocolo de Kioto, adoptado en 1997 en Kioto, Japón, fue el primer acuerdo vinculante a nivel mundial para reducir las emisiones de gases de efecto invernadero. El protocolo estableció objetivos de reducción para los países industrializados para el período 2008-2012. Este sentó las bases para futuros esfuerzos internacionales en la lucha contra el cambio climático.
Posteriormente, en diciembre de 2015, se adoptó el Acuerdo de París en la Cumbre del Clima en París, Francia. El objetivo principal del Acuerdo de París es mantener el aumento de la temperatura global muy por debajo de 2 grados Celsius respecto a los niveles preindustriales, y trabajar para limitar el aumento a 1.5 grados Celsius. Para lograrlo, los países signatarios presentan contribuciones determinadas a nivel nacional (NDC) con sus objetivos de reducción de emisiones y planes de adaptación.
