San Juan toma distancia del 0800 contra el adoctrinamiento y refuerza el control interno
La ministra Silvia Fuentes aseguró que en la provincia no se han recibido denuncias y que se prioriza una educación libre de ideologías, con bibliografía revisada por especialistas.
La decisión del Ministerio de Capital Humano de habilitar una línea nacional gratuita para denunciar posibles casos de adoctrinamiento político-partidario en las escuelas generó diversas repercusiones en el país. La Línea Convivencia Escolar, habilitada al 0800-222-1197, busca canalizar inquietudes vinculadas a situaciones que atenten contra la libertad de conciencia en el ámbito educativo. Pero, ¿cuál es la postura de San Juan?
En diálogo con Radio Sarmiento, la ministra de Educación de la provincia, Silvia Fuentes, brindó definiciones clave sobre el tema y explicó que, en San Juan, no se han registrado denuncias formales. "Nosotros tenemos un mecanismo aceitado que va desde los directivos y supervisores hasta el Ministerio. Si un padre, alumno o docente tiene alguna inquietud, se canaliza por esa vía", explicó.
Fuentes remarcó que en la provincia se ha realizado una revisión minuciosa de la bibliografía que llega a las escuelas. "Hoy no entra ningún material que no haya sido evaluado previamente por nuestros especialistas. La escuela no puede ser un lugar de bajada de línea, sino de pensamiento crítico", sostuvo.
Uno de los temas que generó mayor controversia fue el de la educación sexual. La funcionaria confirmó que se retiraron los materiales distribuidos por la gestión nacional anterior. "No se está utilizando bibliografía que hable de ‘todes’, lenguaje inclusivo o prácticas sexuales específicas. Esa línea fue eliminada", aseguró.
Respecto al enfoque actual, señaló: "Cada escuela tiene su proyecto de Educación Sexual Integral, adaptado a su contexto. Se prioriza el cuidado del cuerpo, la prevención y el trabajo conjunto con las familias. Pero nunca desde una imposición ideológica".
Además, Fuentes explicó que desde el gobierno provincial se reforzó el equipo de gabinetes escolares con nuevos cargos de psicólogos, psicopedagogos y trabajadores sociales, para acompañar mejor a los estudiantes. "Nuestra función es cuidar la cabeza de cada uno de nuestros chicos y garantizar que la escuela sea un espacio de aprendizaje real, sin contaminaciones", sostuvo.
Finalmente, fue contundente con el uso del lenguaje inclusivo en las aulas: "No está permitido. En la escuela debe circular el conocimiento científico, claro y riguroso. El docente no puede imponer ni su ideología ni su forma de hablar".