Interpelación en marcha y un cruce polémico con la intendenta Rosas
La intendenta Romina Rosas intentó anticiparse a su interpelación por la millonaria deuda con la empresa DECSA, pero su irrupción en el Concejo Deliberante sin cumplir los requisitos legales desató una fuerte polémica y obligó a levantar la sesión. La oposición exige explicaciones formales y documentación respaldatoria
La millonaria deuda que el Municipio de Caucete mantiene con la Distribuidora de Energía Eléctrica (DECSA) sigue escalando en el terreno político. En medio de fuertes cuestionamientos por la falta de información oficial sobre cómo se originó el pasivo con la empresa de energía, el Concejo Deliberante resolvió citar a la intendenta Romina Rosas para ser interpelada. Sin embargo, la jefa comunal intentó anticiparse al proceso legal y generó un cruce de alto voltaje con los concejales, que terminó con el levantamiento de la última sesión ordinaria.
El hecho que encendió la polémica ocurrió el jueves pasado, cuando Rosas se presentó de forma sorpresiva en el recinto legislativo local, sin haber cumplido con los requerimientos formales que establece la Carta Orgánica municipal para una interpelación. La sesión estaba en curso y no incluía el tratamiento de este tema en el orden del día. La irrupción de la intendenta, sin documentación previa ni autorización del cuerpo, derivó en un tenso intercambio con los ediles, que consideraron su actitud como una violación del procedimiento institucional.
La solicitud de interpelación había sido presentada formalmente días antes, con la firma de cuatro concejales, quienes establecieron como fecha del acto el próximo 12 de junio a las 10 de la mañana. La presencia anticipada de Rosas fue interpretada como una maniobra para evadir el cumplimiento de los plazos legales y el requerimiento de presentar documentación respaldatoria.
"Fue un hecho insólito desde lo institucional. La intendenta quiso invadir el Concejo Deliberante en plena sesión, sin haber cumplido los plazos ni presentar un solo papel", expresó el concejal Emanuel Castro Lazo en diálogo con Zonda Diario. El edil remarcó que la Carta Orgánica es clara: deben transcurrir al menos 15 días desde la aprobación de la interpelación para que se concrete el acto. "Además, no trajo ningún documento, y eso es clave para que los concejales podamos analizar lo que expone", detalló.
Desde la oposición sostienen que el municipio debe explicaciones sobre cómo se generó la deuda con DECSA, que fue confirmada tanto por el interventor de la empresa como por las autoridades del Ente Provincial Regulador de la Electricidad (EPRE). "Queremos saber qué auditoría hizo el municipio, qué documentación presentó a los organismos competentes y cómo piensa afrontar este compromiso: si a través de un convenio de pago, un juicio, o alguna otra vía", subrayó Castro Lazo.
Para los concejales, la interpelación es necesaria no solo por la magnitud de la deuda, sino por el nivel de desinformación. "Todo lo que sabemos sobre este tema lo hemos leído en los medios, pero oficialmente no hemos recibido ningún informe", se quejó el edil.
Del otro lado, la intendenta Rosas defendió su decisión de presentarse espontáneamente ante el cuerpo deliberativo. Aseguró que su intención era "dar explicaciones" y lamentó que no se le haya permitido hablar. Sin embargo, desde el Concejo fueron tajantes: "Acá no se trata de si queríamos escucharla o no, se trata de respetar los procedimientos legales. Nadie puede irrumpir en una sesión ordinaria sin estar en el orden del día ni contar con autorización del cuerpo. Ni siquiera la intendenta", concluyó Castro Lazo.