Cuando la Selección Argentina de Fútbol debutó en el Viejo Continente
En abril de 1928, la Selección Argentina de Fútbol jugó sus primeros partidos en Europa, previos a su participación en los Juegos Olímpicos de Ámsterdam.

En abril de 1928, la Selección Argentina de Fútbol jugó sus primeros partidos en Europa, previos a su participación en los Juegos Olímpicos de Ámsterdam que se desarrollaron durante el mes de mayo.
Hasta ese entonces, la Albiceleste solamente había jugado en Sudamerica, convirtiéndose junto a Uruguay en las dos selecciones más importantes de esta parte del continente.
Sin embargo los uruguayos habían demostrado su poderío al ganar la medalla de oro en los Juegos Olímpicos de París en 2024, torneo, que en ese momento, era considerado el más importante a nivel de selecciones.
Con el objetivo de mostrar a los europeos, el nivel del fútbol argentino, la Asociación Amateurs Argentina de Football decidió enviar la Selección a los Juegos Olímpicos que se jugarían en la capital de los Países Bajos.
Pero antes de presentarse en la cita olímpica, los argentinos organizaron dos partidos que le sirvieron de preparación y también para conocer el fútbol europeo, desconocido para la Albiceleste.

El 1 de abril, la Selección jugó su primer partido en el Viejo Continente enfrentando a Portugal en el Estadio da Luz de Lisboa ante más de 20 mil espectadores. El encuentro finalizó empatado en cero.
El equipo argentino, dirigido por José Lago Millán, formó con Octavio Díaz; Ludovico Bidoglio, Fernando Paternoster, Segundo Medici, Saúl Calandra, Rodolfo Orlandini; Natalio Perinetti, Pedro Ochoa, Domingo Tarasconi, Roberto Cherro y Raimundo Orsi.
Una semana más tarde, la Albiceleste se presentó en la capital española ante el Athletic Club de Madrid (actualmente Atlético de Madrid), que en los días previos al partido se había proclamado campeón de la región Centro de España.
El encuentro, que se jugó en el Estadio Metropolitano, terminó con una victoria para los argentinos por 2 a 0 con goles del jugador de Estudiantes de La Plata, Manuel Ferrerira, y Roberto Cherro, delantero de Boca.
Varios incidentes oscurecieron el primer triunfo Albiceleste en Europa: luego del primer gol argentino, los hinchas madrileños invadieron el campo de juego, algo que repitió en el segundo tiempo cuando el argentino Luis Monti y el español Cosme Vázquez se agarraron a trompadas.
Ante esta nueva invasión, Octavio Díaz, quien era el arquero suplente de Argentina y que ofició de árbitro porque el juez designado se había enfermado, decidió suspender el encuentro.
Ese 8 de abril, Argentina formó con Bossio, Bidoglio, Paternóster; Médici, Zumelzú, Monti; Perinetti, Ochoa, Nolo Ferreira, Cherro y Orsi.
En los Juegos Olímpicos, la Albiceleste llegó a la final luego de golear sucesivamente a Estados Unidos, Bélgica y Egipto. En la final cayó ante Uruguay en el partido de desempate, después de empatar el primer encuentro, volviendo al país con la medalla de plata.