El brote de peronóspera afectó solo al 4% de los viñedos
Si toma la superficie la superficie total cultivada en San Juan el impacto del daño no es tan grande. La situación se agrava en los departamentos donde hubo mayor presencia del brote de la pronóspera
A tres semanas del llamado a informar daños por el brote de peronóspora, 153 productores sanjuaninos han reportado afectaciones en un total de 1.526 hectáreas de vid, lo que representa el 4% de la superficie total cultivada en la provincia. San Juan cuenta con algo más de 40.000 hectáreas de viñedos, y este brote temprano del patógeno ha generado alarma, particularmente en los departamentos de 25 de Mayo, Caucete y Sarmiento, que concentran el 98% de los daños.
Datos críticos sobre los daños reportados
El brote de peronóspora ha tenido un impacto desigual en las regiones afectadas. En los tres departamentos más perjudicados, el daño promedio alcanza el 7% de la superficie total cultivada. Sin embargo, para los productores que han informado pérdidas, la situación es mucho más grave: el 50% de sus viñedos fueron afectados.
25 de Mayo encabeza la lista con 76 productores que reportaron daños en 956 hectáreas. Lo que representa casi el 6% de la superficie cultivada con vid en ese departamento.
Caucete y Sarmiento completan el podio de las zonas más perjudicadas, aunque no alcanzan las cifras de 25 de Mayo.
Variedades afectadas: La uva cereza, clave para la producción local, sufrió el mayor impacto, concentrando el 60% de los daños registrados.
En contraste, los departamentos de San Martín, Pocito y 9 de julio reportaron daños menores, que en conjunto representan menos del 2% de las hectáreas afectadas.
Factores que impulsaron el brote temprano
Informes técnicos elaborados sobre el brote de peronóspera indican que el ciclo de este año presentó condiciones climáticas que favorecieron el desarrollo del hongo, un patógeno que prospera en ambientes húmedos y con temperaturas moderadas. Las claves fueron:
Exceso de agua: La provisión de agua en algunas zonas excedió los niveles habituales, sumándose a precipitaciones esporádicas.
Temperaturas moderadas: El rango ideal para el desarrollo del hongo (12-24 °C) se mantuvo durante varias semanas.
Alta humedad relativa: Superando el 70%, este factor fue determinante para la aparición de la enfermedad.
Presencia de agua en tejidos: La película de agua en la superficie de las hojas completó las condiciones ideales para el desarrollo del patógeno.
La situación real
El brote de peronóspora no solo afecta los rendimientos de este ciclo productivo, sino que también impone un desafío significativo para el manejo sanitario de los viñedos en los próximos meses. Las autoridades, encabezadas por la Secretaría de Agricultura, Ganadería y Agroindustria, han evaluado el impacto económico del brote y las posibles ayudas a los productores damnificados.
