La noche que puso en jaque la salud mental de Mike Tyson
A un mes de su enfrentamiento contra Jake Paul, el legendario exboxeador Mike Tyson reveló que no recuerda gran parte del combate y que enfrentó graves problemas de salud durante su preparación
Un mes después de su mediático regreso al cuadrilátero en el AT&T Stadium de Arlington, Texas, Mike Tyson dejó perplejos a sus fanáticos al confesar que no recuerda gran parte de su enfrentamiento contra Jake Paul. La leyenda del boxeo, de 58 años, reveló detalles preocupantes sobre su estado físico y mental antes y después del combate, lo que generó dudas sobre la conveniencia de su retorno al ring.
Un regreso cargado de expectativa
La pelea, transmitida por Netflix y vista por más de 100 millones de espectadores, marcó el regreso de Tyson tras su última aparición en un combate de exhibición contra Roy Jones Jr. en 2020. Sin embargo, lo que prometía ser un espectáculo de alto nivel dejó un sabor amargo. Tyson mostró destellos de su antigua gloria en la primera ronda, pero su rendimiento decayó rápidamente, permitiendo a Paul, un influencer convertido en boxeador, llevarse una victoria cómoda por decisión unánime.
"No recuerdo mucho la pelea"
En una entrevista con Fox Sports Radio, Tyson sorprendió al admitir que su memoria de la noche es prácticamente nula. "No recuerdo mucho la pelea, me quedé en blanco", afirmó. Incluso mencionó que no ha visto la grabación del combate. El excampeón mundial apenas tiene recuerdos de un momento en el último round, cuando Paul bajó la guardia para rendirle homenaje.
Además, Tyson confesó haber enfrentado graves problemas de salud durante su preparación. "Casi muero durante mi campamento de entrenamiento previo a la pelea", reveló. Aunque asegura no haber sentido fatiga tras el enfrentamiento, despertó al día siguiente con dolores intensos en el pecho y el abdomen, indicando las secuelas físicas de un combate que no recuerda claramente.
Controversias y críticas
La derrota, que engrosó el récord de Tyson con siete caídas profesionales, también estuvo rodeada de controversias. Algunos fanáticos sugirieron que la pelea podría haber sido arreglada, especialmente tras la difusión de un video en el que el exboxeador parece esquivar un golpe de manera inusual. Estas teorías avivaron debates sobre si Tyson debió haberse retirado definitivamente tras su exhibición contra Jones Jr., donde mostró mayor competitividad.
"Pierdes, pero aun así ganas"
A pesar de las críticas, Tyson adoptó una perspectiva optimista. "No tengo arrepentimientos por haber subido al ring una última vez", reflexionó. El enfrentamiento no solo le dejó un cheque de 20 millones de dólares, sino que también le permitió cerrar su carrera con una experiencia que considera valiosa, aunque inquietante.
