Patricia Bullrich: "En Chubut no vive nadie, hay un millón de guanacos"
Las declaraciones de la ministra de Seguridad, desestimando a la población chubutense con la frase "En Chubut no vive nadie, hay un millón de guanacos", añaden más polémica a un conflicto ya tenso por la distribución de fondos de coparticipación.
En medio del tenso conflicto entre el presidente y losgobernadores por la distribución de fondos de coparticipación, la ministra de Seguridad, Patricia Bullrich, lanzó una frase desafortunada que avivó aún más las llamas de la disputa. Al referirse al gobernador de Chubut, Ignacio Torres, quien amenazó con cortar el suministro de petróleo y gas en su provincia, Bullrich declaró: "En Chubut no vive nadie, hay un millón de guanacos".
Estas palabras, lejos de contribuir a calmar las tensiones, generaron un nuevo foco de controversia en un conflicto ya candente. La ministra, ex presidente del PRO, buscaba desmerecer la posición de Torres, perteneciente al mismo partido político que ella, al tiempo que destacaba los activos naturales de la provincia como la pesca y el petróleo.
La situación en Chubut se había intensificado cuando el gobernador Torres, respaldado por varios de sus pares patagónicos, amenazó con interrumpir el suministro de gas y petróleo si la provincia no recibía los fondos de coparticipación. Esta medida fue respaldada por una serie de gobernadores de diferentes partidos políticos, incluyendo tanto a Juntos por el Cambio como al oficialismo.
Bullrich, sin embargo, defendió la posición del gobierno nacional y criticó la amenaza de Torres, argumentando que la provincia no debería estar en una situación de pobreza dada la riqueza de sus recursos naturales. Además, insinuó que el conflicto estaba siendo utilizado por ciertos actores políticos, incluyéndose a sí misma, en una lucha interna por el poder dentro del PRO.
Las declaraciones de Bullrich no solo profundizaron la brecha entre los actores políticos involucrados en el conflicto sino que también generaron reacciones negativas por parte del gobernador Torres, quien la acusó de utilizar la situación para sus propios fines políticos, en lugar de abordar las necesidades reales de la provincia.
Con esta nueva polémica, el conflicto por la coparticipación continúa escalando, dejando en evidencia las tensiones internas tanto dentro de Juntos por el Cambio como en la relación entre los gobernadores y el gobierno nacional.
