Tensión afuera del Congreso: Patricia Bullrich respalda el operativo policial
A pesar de las tensiones y la aplicación del protocolo antipiquetes, Bullrich respalda el accionar policial, minimizando la violencia y destacando el operativo como un "logro" para contener a quienes buscaban "tomar la calle de forma violenta".
En medio del debate sobre el proyecto de Ley Ómnibus propuesto por el Poder Ejecutivo, la tarde y noche del jueves en los alrededores del Congreso de la Nación se vieron envueltas en momentos de tensión y violencia. Las fuerzas de seguridad desplegaron el protocolo antipiquetes, desencadenando una serie de enfrentamientos con manifestantes que terminaron con el uso de gases lacrimógenos, balas de goma y camiones hidrantes.
La ministra de Seguridad, Patricia Bullrich, en un intento por minimizar la gravedad de los hechos, respaldó el operativo policial y cuestionó la existencia de violencia durante la represión. "¿Qué violencia hubo?" se preguntó, desatando una ola de críticas por parte de diversos sectores de la sociedad.
En declaraciones brindadas ante la prensa el viernes por la mañana, Bullrich defendió el accionar de las fuerzas de seguridad, argumentando que el operativo tuvo como objetivo dispersar a aquellos manifestantes que, según ella, buscaban tomar la calle de manera violenta. "Fue todo ordenado porque había bastante fuerza. Viene el desorden total y ahí sí que no hay posibilidad de proteger a los miembros de las fuerzas de seguridad", afirmó la ministra.
A pesar de las imágenes y testimonios que evidenciaron la violencia desatada por parte de las fuerzas de seguridad, Bullrich insistió en su postura, llegando incluso a desacreditar el testimonio de un manifestante herido. Según la ministra, dicho individuo no resultó herido durante la represión en el Congreso, sino que previamente había sido víctima de un robo y luego simuló haber sido herido en la protesta.
Bullrich calificó el accionar de las fuerzas de seguridad como un "logro", argumentando que se logró contener a los manifestantes violentos y evitar un mayor desborde. "Al ver la escena de cerca la cantidad de cosas que volaban, como palos, botellas y cosas de permanente agresión con intento de hacer retroceder a las fuerzas de seguridad, implicó un movimiento de dispersión para que la gente que quería tomar la calle de forma violenta vuelvan para atrás. Fue lo que se logró", expresó la ministra.
Las declaraciones de Bullrich han generado un profundo rechazo por parte de organizaciones de derechos humanos y sectores políticos opositores, quienes denuncian un uso desproporcionado de la fuerza por parte de las autoridades y exigen una investigación exhaustiva sobre lo ocurrido durante la represión en las afueras del Congreso.
