Francisco llama a "desmasculinizar" la Iglesia y pide más presencia femenina
Francisco recibió en el Vaticano a un grupo de la Comisión Teológica Internacional y cuestionó la poca cantidad de mujeres en el grupo, y manifestó que "uno de los grandes pecados que hemos tenido es la masculinidad de la Iglesia".
En una audiencia reciente en el Vaticano con un grupo de la Comisión Teológica Internacional, el Papa Francisco hizo un llamado enérgico a "desmasculinizar" la Iglesia y destacó la necesidad de incrementar la presencia femenina en sus estructuras, reconociendo la "capacidad teológica distinta" que poseen las mujeres.
El pontífice expresó su preocupación por la falta de representación femenina en el ámbito teológico, señalando la presencia mayoritaria de hombres en el grupo que lo visitó. "La teología, la reflexión teológica, es muy importante. Pero hay algo que no me gusta de ustedes, disculpen mi sinceridad. Una, dos, tres, cuatro mujeres: ¡Pobres! ¡Están solas! Ah, lo siento, cinco. ¡Debemos avanzar en esto!", instó el Papa.
Francisco destacó la importancia de reconocer la capacidad única de reflexión teológica que aportan las mujeres, afirmando que la Iglesia es inherentemente femenina. "La Iglesia es femenina. Y si no sabemos entender qué es una mujer, cuál es la teología de una mujer, nunca entenderemos qué es la Iglesia", enfatizó.
El líder de la Iglesia católica identificó la "masculinidad de la Iglesia" como uno de los "grandes pecados" que deben abordarse. Sin embargo, a pesar de su llamado a desmasculinizar la Iglesia, el Papa advirtió que la solución no debería centrarse únicamente en el ámbito ministerial, descartando la ampliación de roles para las mujeres en la Iglesia como una medida suficiente.
El Papa Francisco se pronunció en contra de abordar la cuestión de la representación femenina mediante el "camino ministerial", descartando así la posibilidad de una ampliación de los roles que las mujeres pueden ocupar en la Iglesia. Esto ocurre en medio de crecientes presiones de algunos sectores para lograr la incorporación del diaconado femenino en la estructura eclesiástica.
