Prisión perpetua para los cinco imputados por la muerte del jubilado
Juan Jorge Brizuela, era un jubilado de 67 años que asesinado en medio de un robo que se produjo en una finca de Caucete. Tres hombres y dos mujeres recibieron la pena máxima.
Finalmente los jueces Muñoz Carpino, Miguel Dávila Saffe y Martín Heredia Zaldo (Sala I, Cámara Penal), entendieron que todos fueron culpables, en diferentes medida, de asesinar a Juan Jorge Brizuela, un jubilado de 67 años que fue asesinado tras un robo que se produjo en una finca del departamento Caucete .
De esta manera recibieron la pena máxima (prisión perpetua) por este crimen Elio Castellano (24), Lucas Herrera (27), Viviana Pereyra (52), Leonela Moreta (31) y Martín Moreta (21), quienes mataron a golpes a Brizuela (67) en su casa de la finca que cuidaba, sobre Avenida de Los Ríos, el pasado 27 de noviembre de 2020, en Caucete.
Para el tribunal quedó más que comprobado que los cinco imputados, ya condenados, cometieron un crimen triplemente agravado: por con ensañamiento (hacer sufrir a la víctima), por el acuerdo premeditado entre dos o más personas y criminis causa, que se configura cuando el autor mata para poder cometer otro delito y salir impune.
A esta pena se le sumó otro delito como fue el robo seguido de muerte, ya que a Brizuela se le sumó el robo de una moto y el Renault Torino de la víctima, que utilizaron para llevarse varias cosas de este jubilado, en el que cargaron un montón de cosas, incluidas un televisor, dos garrafas, dos parlantes, una pala y otras herramientas y máquinas.
Luego ese mismo auto apareció quemado esa misma madrugada. Y al menos el televisor y una garrafa fueron devueltos por unos vecinos que los compraron cuando supieron que provenían del brutal ataque a Brizuela.
La fiscal Silvina Gerarduzzi había pedido al tribunal que condenara a la pena máxima, perpetua, a cuatro de los cinco acusados y para Castellanos había pedido 15 años por participación secundaria.
En tanto, el defensor de Castellano, había solicitado que su cliente fuese condenado sólo por el delito que se comprometió cometer, el robo simple de unos lechones que había en la finca. Y Nicolás Gómez Camozzi había pedido la absolución de Leonela Moreta, su hermano Martín, la madre de ambos, Viviana Pereyra y Lucas Herrera.
Lo cierto es que termino pesando los dichos de la fiscal por lo que el tribunal decidió condenar con la pena máxima a estos cinco asesinos.
