El Chagas un enemigo silencioso
En San Juan, un equipo dedicado del Control de Vectores trabaja incansablemente en la prevención. Detalles en la nota.
El Chagas, también conocido como tripanosomiasis humana americana, es una enfermedad silenciosa que afecta a millones de personas en América Latina y se está extendiendo a nivel internacional. En San Juan, un equipo dedicado del Control de Vectores trabaja incansablemente en la prevención, difusión y fumigación para combatir esta enfermedad .
El Chagas es una enfermedad causada por el parásito Trypanosoma cruzi y afecta a entre 6 y 8 millones de personas en 21 países de América Latina. Sin embargo, con el aumento de las migraciones y los viajes internacionales, se están registrando casos en Estados Unidos, Europa, Australia y Japón. A pesar de los avances en el control vectorial en las áreas endémicas, más del 95% de los infectados desconocen su estado y, por lo tanto, no han recibido tratamiento.
La enfermedad es transmitida por el insecto vector conocido como triatomino, vinchuca, chinche picuda o barbeiro, dependiendo de la región. Estos insectos habitan en las grietas de las viviendas precarias construidas con materiales como adobe, ramas o paja, lo que hace que las poblaciones más vulnerables sean las más afectadas.
La vía de transmisión clásica es la vectorial, donde el parásito se transmite a través de las heces del insecto depositadas en la piel o mucosas de las personas. También existen otras vías de transmisión no vectorial, como la transmisión de madre a hijo durante el embarazo, transfusiones de sangre, trasplantes de órganos y la ingestión de alimentos contaminados.
Los síntomas del Chagas varían en las dos fases de la enfermedad, aguda y crónica. En la fase aguda, la enfermedad generalmente es asintomática, pero alrededor del 30% de los infectados desarrollan problemas cardíacos graves que pueden acortar la esperanza de vida en promedio 10 años. Más del 80% de las muertes relacionadas con el Chagas se deben a complicaciones cardíacas, como fallos cardíacos y arritmias.
El diagnóstico del Chagas puede ser un desafío, especialmente en la fase crónica. Se requieren pruebas de laboratorio especializadas y personal capacitado. Actualmente, se utilizan pruebas de diagnóstico rápido para acelerar la detección de casos, aunque aún es necesaria la confirmación en laboratorio. Esto marca un punto de inflexión en la lucha contra el Chagas, ya que permitirá poner en tratamiento a más personas de manera más rápida.
El tratamiento del Chagas se basa en dos medicamentos específicos: benznidazol y nifurtimox. La tasa de curación es alta en la fase aguda y puede ser efectiva incluso en las primeras etapas de la fase crónica. Aunque estos tratamientos pueden tener efectos adversos, la mayoría de ellos pueden tratarse en la atención primaria de salud.
En San Juan, el Control de Vectores trabaja incansablemente en la prevención, difusión y fumigación para combatir la propagación del Chagas. Su labor es esencial para proteger a la población y prevenir la transmisión de esta enfermedad olvidada.
La concientización y el acceso a pruebas de diagnóstico y tratamiento son cruciales en la lucha contra el Chagas, y la labor del Control de Vectores en San Juan es un ejemplo de compromiso en esta batalla contra una enfermedad que aún afecta a millones en todo el mundo. .
