Dura homilía del arzobispo porteño ante la crisis económica

Jorge García Cueva, arzobispo de Buenos Aires, realizó una dura homilía ante la crisis económica que atraviesa el país en la misa central que se celebró por el día de San Cayetano, el patrono del pan y el trabajo.

"Por más que muchos tienen trabajo no alcanza, no hay bolsillo que alcance", dijo García Cuerva en la homilía en Liniers frente al santuario de San Cayetano, y agregó: "Soñemos con más y mejor trabajo para todos y todas porque no existe peor pobreza que aquella que priva del trabajo y de la dignidad del trabajo a su pueblo".

En otra parte de su alocución, el arzobispo porteño pidió "un trabajo digno bien remunerado; paz para nuestro pueblo atravesado por la violencia de la inseguridad social y económica; la inseguridad de no tener un futuro alentador, ni esperanzas para los hijos y nietos; le pedimos políticas públicas que reconozcan el esfuerzo y la actividad de tantos hermanos que se desloman todos los días".

"Los alimentos, como todo, aumentan, y como decía mi abuelo ‘no hay bolsillo que alcance’. Y le pedimos a San Cayetano, mejor pan, porque tampoco nos podemos resignar a que nuestros chicos y familias más pobres vivan a polenta, fideos y arroz", afirmó García Cuerva.

"Te pedimos mejor trabajo, te pedimos mejor pan, te pedimos más salud, te pedimos paz para nuestro pueblo; y lo hacemos con mucha fe, a pesar de la exclusión, de la inflación, del desencanto y de los sueños rotos", expresó el arzobispo.