El Cacique lo logró y ahora es del Oro
La larga y penosa espera concluyó para Huazihul que llegó a la elite del rugby cuyano ganando a Peumayen RC por 23 a 18.
A Huazihul nadie podrá reprocharle nada. Haber llegado a sumarse para la temporada 2024 a la elite del rugby cuyano le costó sangre, sudor y lágrimas. Y en esta final, Peumayen la visita, presentó sus argumentos que por momentos causó alarmas al local.
Las Callecitas de Rivadavia volvieron a colmarse, y la leonera volvió a rugir.
Huazi tuvo una virtud y en ella se fortaleció. Fue mas paciente y ordenado, y si bien alcanzo varias mesetas, habrá que indicar que entendió el juego disociado y lateral que dispuso Peuma.
El de las banderas rojas y negras enarbolo con su materia prima lo que debía ante su contendor, llevando muy al pie de la letra su propio librito.
Mientras La Leonera se transformaba en el jugador Nº 16, Los Caciques jugaban proponiendo desde los extremos o cerrados, tractoreando desde cada latitud de la cancha, herrando en lines, y siendo solidos y por momentos avasallantes en scrum.
Los Toritos fueron audaces, sagaces, y sobre todo ajenos al juego colectivo que los caracteriza. Desde todos sus frentes jamás dejaron de intentar, pero en solitario, y en este deporte eso es un pecado que se paga al final, en el minuto 80.
Cuando el silbatazo final llego la alegría ya se había transpolado a todo el Rugby Sanjuanino. Todos y Todas fuimos Huazihul. Cada alma salto a la cancha a festejar. Los espíritus de cada espectador se confundía con El Buby Mugnos, El Papagallo De La Plata, Jaime Debelaustegui, Julio Conca, Orlando Gonzalez, Carlos Yornet, Maco Puigdengolas, Jorge Cocco, o Don Carlos Finnemore. Y cada corazón quedo regocijado y en paz. Porque, estimados contertulios, valla si la familia de Huazihul tuvo que sufrir para volver al lugar del que jamás debió haber sido despojado. Y lo mejor de todo, es que lo logro donde debe ser: dentro de la cancha.
Ahora si, Rivadavia vuelve a la primera, porque Huazi lo logro, y ahora si podremos oír: "Que de la mano, de Luis Gonzalez, todos las vuelta vamos a dar".
