Tres jugadores podrían recibir duras sanciones por la batalla campal
Los jugadores están en la mira por comportamiento indebido: a uno lo acusan de estar en el campo de juego sin autorización y a otros dos por incitar a la violencia.
Tras el final polémico que se desató en el superclásico entre River y Boca de este último domingo, varios jugadores fueron apuntados por la Fiscalía que se encarga del control en eventos masivos.
Marcos Rojo, Luis Vázquez y Agustín Palavecino fueron informados por la Policía de la Ciudad que los consideró responsables de incitación a la violencia.
Marcos Rojo fue identificado dentro del campo de juego y se le inició una averiguación por encontrarse en un lugar sin autorización. Esta infracción está penada por el Artículo 111 y puede desembocar en una multa económica o en trabajo comunitario. El monto estipulado podría ser el doble del habitual, ya que posteriormente se produjo una pelea y también está considerado en ese pasaje de la ley.
Por otra parte, Agustín Palavecino y Luis Vázquez están siendo investigados por incitar al desorden. Según el artículo 119, quienes cometen esta falta en un espectáculo masivo de carácter artístico o deportivo deben ser sancionados con una multa económica o arresto, de 5 a 30 días. La sanción también se aumenta al doble si la provoca algún futbolista, como en este caso.
El jugador de River inició la pelea con un gesto provocador: le gritó el gol en la cara a los rivales. El delantero de Boca, por su parte, fue quien intentó golpearlo: se lo vio desaforado, corriendo detrás del volante millonario.