Luchó años contra el alcohol, lo superó y levanta un centro de rehabilitación en su casa
Se trata de Javier Cortez quien construye a pulmón un local en el frente de su casa. Además, acuden a la solidaridad de la población para poder avanzar, por altos costos de los materiales.
Javier Cortez, alias el "Chiviota" es un conocido zapatero jachallero que desde hace 8 años se rehabilita en Alcohólicos Anónimos y gracias a esto pudo dejar su adicción. Pero en este último tiempo, les advirtieron a él y al grupo, que se pueden quedar sin espacio físico para llevar adelantes sus reuniones semanales, donde luchan contra su adicción. Por esto, comenzó a construir un pequeño salón en el frente de su casa para que puedan reunirse. Sin embargo, los altos costos de los materiales, la obra avanza muy lento y pide ayuda para poder terminarlo.
Diario El Zonda dialogó con Javier quien está lleva adelante la construcción y quien lucha para no perder su grupo de rehabilitación y explicó: "Tomé esta decisión para que todos tengas sus posibilidades de rehabilitación como la tuve yo. Cuando estás en esa situación es difícil salir, pero si no lo haces acompañado se hace aún más". Y agregó: "Te lo dice alguien que perdió mucho por el alcohol".
Además, dio a conocer que la construcción que realiza "es pequeña y es todo a pulmón, yo solamente hago arreglos de calzados y no es mucha la ganancia que tengo. Como fui albañil yo lo estoy levantando, pero necesito materia prima porque está muy cara. Ahora me hacen falta más blocks y realizar el contrapiso. Cualquier ayuda es bienvenida".
Por otra parte, Javier contó que "las reuniones siempre se llevaron adelante en el Hospital San Roque, pero debido a las construcciones y el traspaso para el nuevo hospital el grupo ´Solo por Hoy´ al cual pertenezco nos quedaríamos sin espacio".
Por otro lado, su hija, Marianela Cortez realizó un posteo en sus redes para recolectar ayudas y la publicación tuvo ciento de compartidos. En diálogo con este medio la joven detalló: "Ellos necesitan un espacio donde puedan juntarse, es un grupo pequeño, pero sin las reuniones semanales corren riesgos en volver a caer".
Asimismo, la joven pidió "la solidaridad del pueblo en general, cualquier donación es bienvenida para culminar su centro".
Para cerrar, Marianela expresó: "Me da mucha alegría saber que él está rehabilitado y que lucha para no volver a caer en la adicción. Y me llena de orgullo saber que quiera seguir ayudando a personas que están sufriendo lo que a él le pasó".
