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Te propongo preguntar qué necesidad concreta hay en tu comunidad.

Por Monseñor Jorge Lozano 

En este día recemos por todos los hombres y mujeres que sufren a causa de no tener un trabajo digno. Feliz día del trabajo.

Habitualmente identificamos el cerebro con el pensamiento, y el corazón con el amor. Partiendo de esto, te propongo un sencillo ejercicio. El cerebro se ubica muy cerca de los labios, y de ellos para llegar al corazón hay que recorrer apenas unos 30 centímetros. Es muy importante para una vida coherente unir el pensamiento, el afecto y lo que decimos.

Por ejemplo, cuando rezamos verbalmente el Padrenuestro afirmamos la convicción de sabernos hijos de Dios y hermanos de toda la humanidad, cuestión que es importante expresarla también con el amor hacia aquellos que consideramos de la misma familia. Pero esto no es suficiente.

Volvamos a la métrica. De la parte superior del cuerpo hasta el bolsillo parece haber kilómetros y rutas inaccesibles. Profundos abismos y escarpadas cordilleras. Aquí se pone en juego la autenticidad de la coherencia para superar la retórica que hace "quedar bien", mera fachada del vacío que se esconde.

En la Biblia, en el libro de los Hechos de los Apóstoles, se nos muestra a los primeros cristianos poniendo todo en común y atendiendo a las necesidades de los más pobres y excluidos. Y esta práctica no sólo promovida reemplazando a la audacia y la confianza en la Providencia de Dios.

Es necesario sostener entre todos lo que es de todos. Te cuento algo que me pasó, hace ya muchos años, visitando una parroquia. Fui con tiempo suficiente para conversar con el párroco que me planteó una necesidad. El vehículo que tenía estaba ya bastante gastado y hacía falta renovarlo para poder cubrir su extensa Parroquia, con unas cuantas comunidades.

Me presentó entonces un proyecto para solicitar dinero para tal fin a una organización de la iglesia alemana. Al terminar la celebración de la misa me dediqué a saludar a la feligresía en la puerta del templo. Allí pude observar que quienes regresaban a sus casas abordaban autos y camionetas bastante nuevas y, algunas, costosas.

Al volver a la sacristía le dije al párroco "¿por qué pedir a los católicos de Alemania lo que pueden poner los fieles locales?". Con un 2% del valor de los vehículos que estaban estacionados para una sola de las

Te propongo preguntar qué necesidad concreta hay en tu comunidad.

La misión también se sostiene desde el bolsillo

Por monseñor Jorge Eduardo Lozano, arzobispo de San Juan de Cuyo y secretario general del Consejo Episcopal Latinoamericano (CELAM)

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