Civiles atrapados en Mariupol beben agua de lluvia y comen palomas para vivir
Civiles atrapados en Mariupol beben agua de lluvia y comen palomas para vivir. La joven Galyna Balabanova ha pasado las últimas tres semanas de asedio en su ciudad natal de Mariupol, en el sureste de Ucrania, donde sus vecinos han llegado a recoger agua de la lluvia y cocinar palomas que encontraban en las calles para sobrevivir al cerco de las tropas rusas ante la falta de suministros básicos.
"Los vecinos se unían y habilitaban los sótanos como refugios. Ahora recogen agua de lluvia y cocinan palomas y otros animales en hogueras para poder sobrevivir. En la ciudad apenas hay medicamentos", cuenta Balabanova a Efe en una conversación telefónica.
Mariupol, ciudad de medio millón de habitantes, es una de las más castigadas de ese conflicto y casi el 70% de las casas de la ciudad han resultado dañadas por los bombardeos, según las autoridades municipales.